martes, 23 de diciembre de 2014

Lo mejor de 2014, según Quixote

¿Qué bonito ha sido 2014, no? Bueno, aparte de lo de Ucrania, del Ébola, de Robin Williams y de la eliminación del Mundial (todo ello igual de importante, por supuesto). Musicalmente, sin embargo, mucha gente opina que ha sido un año bastante olvidable, y por desgracia estoy bastante de acuerdo. Pero eso no me impide, igual que otros años, compilar esta lista de quince canciones que han sobresalido de entre los hierbajos y que representan lo que, en mi opinión, es lo más destacado de este año que se está acabando ya. Esperemos que no haya sorpresas de última hora, aunque lo que sí que va a haber son omisiones imperdonables, como pasa todos los años... Y hablando de eso:



15. CHVRCHES - Bela Lugosi's Dead


Esta canción no tiene demasiados motivos para estar aquí, pero la incluyo. En parte, porque CHVRCHES es una banda que ha sido excluida tanto de la lista de 2012 ("The Mother We Share") como de la de 2013 ("Gun"). La banda de synthpop, regida por la dulce voz aniñada de Lauren Mayberry, nos ofrece una cover bastante inesperada del clásico de Bauhaus, proveniente al parecer de la banda sonora de una película bastante infumable sobre vampiros adolescentes. El tono es más oscuro que de costumbre (lo que tiene sentido, considerando la canción que están versionando). No me importaría que CHVRCHES escogiera un rumbo post-punk sintético para su próximo álbum, que ya espero con ansias. ¿Tú que opinas, Lauren?

Muchas gracias, maja.

2014 podría haber sido el año en que Azealia Banks se comía el mundo, pero al parecer Iggy Azalea (qué casualidad, el nombre) se le adelantó. La Yung Rapunxel se ha mosqueado, recientemente, por la atención recibida por la australiana, a la que acusa de "apropiarse de la cultura negra" de forma indebida. El caso es que Banks no tiene muchos amigos, cosa que no ha ayudado mucho, como tampoco el hecho de que su debut haya tenido que esperar tres años para ver la luz. Azealia está ahora, por tanto, "persiguiendo el tiempo" (heh) perdido con cosas como este tema, que recuerda a "212" en su ambición. Es una canción para bailar en la que Banks muestra sus dotes para cantar tan bien como rapea, y que te hace bailar, claro. Esperamos que tanto obstáculo no haya puesto fin a su determinación, y que la joven neoyorquina nos siga sorprendiendo en el futuro.

Y que vaya al médico a mirarse lo del Corintio.


13. Run the Jewels - Close Your Eyes (And Count to Fuck)


Antes de que alguien empiece a gritar "ESTO ES ROCKRITICO NO RAPRITICO MALDITO DEMONIO DE MIL COLAS MUERETE DE ALGO TERRIBLE", anuncio que este es el último tema hip hop de la lista, y también que este es mi blog y hago lo que me da la gana. El hip hop es el nuevo punk, en más de un sentido (por ejemplo, deja a gente sin demasiado talento musical expresar sus ideas libremente); además, 2014 ha sido el año en que me he comprado mis primeros discos de este género, por lo que no os sorprendáis demasiado si decido cambiar el nombre al blog y empezar a hablar únicamente de Young Thug. Bromas aparte, Run the Jewels son los nuevos OutKast, y en dos años se han sacado de la manga dos discos clásicos. Este tema contiene la contribución de un tal Zack de la Rocha, y es prácticamente una apisonadora (si bien el beat tampoco es lo más creativo del mundo, pero mantiene la tensión). El-P y Killer Mike intercambian versos como metralletas antes de que el líder de RATM entre en acción. 2015 será el año de su tercer disco, en teoría, y también el año en que lanzen la versión de Run the Jewels 2 interpretada íntegramente por gatos. Temblad.

Bueno, así me vale.


12. Taylor Swift - Out of the Woods


¡Ja ja ja! Pero qué troll que soy. Ya he hablado más que suficiente de Taylor Swift. Decir que 1989 demuestra su llegada a la madurez quizá sea demasiado exagerado, porque por lo que sé su temática ha cambiado aproximadamente cero: sigue hablando de vestidos rojos y besos a la luz de la luna y de sus múltiples novios. Francamente, no escuchéis a esta chica por las letras. El caso es que ha abandonado los bosques de Nashville (¿hay bosques en Nashville? No lo sé, pero supongo que es apropiado para esta crítica) y su country para hacer synth pop, por lo cual estoy muy agradecido. "Out of the Woods" tiene una producción excelente y, por encima de todo, una coda bastante épica. Hay una parte de mí que se ofende cuando digo que me recuerda a Kate Bush, por motivos obvios, pero no puedo dejar de pensar en ello. Bah, maldita sea, ya me siento demasiado mal por incluir esto aquí, no os metáis conmigo.

Pero os quiero igual, corazones.


Creo que esta ha sido la canción del año, en cierto modo. Es la única de esta lista, quizá, que vamos a recordar dentro de unos pocos meses. Tiene aires de eternidad, desde luego. Future Islands salieron más o menos de la nada, y durante un tiempo estuvieron en todas partes. Su marca de identidad, más allá de su música pop ochentera bien llevada, es sin duda la inusual voz de Sam Herring, que está como una cabra y al mismo tiempo es una verdadera inspiración. Es como si necesitara toser todo el rato, cuando canta, pero por otra parte no creo que haya otra voz más apropiada. Es madura y tiene credibilidad. No sé si volveremos a oír de Future Islands, pero nos han ofrecido momentos mágicos, entre los cuales podemos (debemos, de hecho), contar su apasionada interpretación de este tema en el programa de Letterman. Bastante increíble.

Escalofriantes imágenes.


10. Father John Misty - Bored in the USA


Esta canción, con ese título, sólo contempla dos opciones: ser una mierda, o un temazo. Afortunadamente, es lo segundo. Es una balada de piano, un género muerto, que parece de otra época. La voz de Tillman irradia melancolía, pero también sorna. Es de escalofrío. Mientras arremete de forma bastante brutal para una canción tan sosegada contra el establishment  (oh, they gave me a useless education/and a subprime loan) y la vida adulta en general (I've got a lifetime to consider all 
the ways I've grown more disappointing to you), suena una risa enlatada abierta a múltiples interpretaciones. Tras escucharla y estremecerse, sólo queda rezar al President Jesus de la canción para que nos salve a todos.

Y beber. Beber mucho.


9. Perfume Genius - Queen


Hmm. A ver como digo esto. Mike Hadreas es una reinona, y antes de que alguien salte, es bien obvio que él está absolutamente orgulloso de ello, y no es para menos. Esta canción debería convertirse en un himno gay forever and ever, porque aunque no puedo identificarme con aquello de lo que habla, creo que es evidente para cualquiera con dos dedos de frente que su mensaje es devastador, sarcástico y honesto. Hadreas ha decidido dejar de esconderse y ser él, y llevar un estandarte que está en muy buenas manos. "Queen" arremete contra los "guardianes morales" (más bien obsesos ultraconservadores, pero bueno) con su letra afilada (no family is safe when I sashay) y su influencia marcadamente glam. 

Y un vestuario resultón.


8. Todd Terje - Delorean Dynamite


Daft Punk se colgaron, y con razón, la medallita de salvadores de la música disco, herederos de Moroder, blah blah blah... en 2013. Pero un señor de Noruega, inesperadamente, ha aceptado el duelo del dúo francés y con It's Album Time!, casi se podría decir que lo ha superado. La épica hiperespacial "Delorean Dynamite" tiene básicamente todo lo que se podría esperar de un tema de estas caracerísticas: es lo más retro, con diferencia, que se ha lanzado en un año muy, MUY retro. Es la canción perfecta para una carrera de bólidos en un mundo futurista lleno de luces de neón, y pese a la obvia repetición, nunca se hace pesada y siempre te hace estar esperando lo que viene a continuación, gracias a un sutilísimo crescendo que es una absoluta genialidad, y que desemboca en un tranquilo final ambient. El señor Olsen, y no los Daft Punk, es el verdadero sucesor de Giorgio.

Y como buen noruego, parece un asesino en serie.


7. Charli XCX - Boom Clap


BOOM! BOOM! BOOM CLAP! A estas alturas pienso que Charli XCX puede salvar el pop. Es responsable, de forma parcial, de LA canción de 2012, y también de la de 2014, pero nos ha demostrado que sabe hacer temazos ella sola. Supongo que entre Lorde, Charli, twigs, Kimbra y... Taylor Swift... tengo derecho a creer. Esta chiquilla es responsable de los dos estribillos más memorables del año, aunque creo que este se lleva la palma. Es muy infantil, un poco de cheerleader o canción de comba, y por eso es tan efectivo, además de por el contraste con las extrañamente sensuales estrofas (extrañamente porque pertenece a la banda sonora de Bajo la misma estrella, y "sensual" es la última palabra en la que pienso cuando pienso en jóvenes con cáncer, por desgracia para mi psiquiatra). ¿De qué estábamos hablando? Ah, sí. Esta canción mola.

"Sensual..."


6. Owen Pallett - I Am Not Afraid


Este tema son básicamente cuatro minutos de perfección musical. Owen Pallett lleva años orquestando a Arcade Fire y analizando con quizás demasiado detenimiento canciones pop. Básicamente, la definición de héroe es aplicable. Pero además, utiliza esa misma atención al detalle en sus propias fantasías barrocas, como I Am Not Afraid. Delante de una cascada de cuerdas, la suave voz de Pallett nos introduce en un mundo de inseguridad y paranoia del que salimos victoriosos. Alrededor del minuto dos, hay un momento drop the bass, y luego un piano que me recuerda a aquella impresionante colaboración Sakamoto/Sylvian, por alguna razón. Igual que Hadreas en "Queen", aquí Pallett planta cara a sus demonios y consigue vencer, dejando una canción para el recuerdo.

A la lluvia desde luego no le tiene miedo alguno.


5. Sharon Van Etten - Your Love Is Killing Me


El género de la cantautora femenina, diga lo que diga el ejemplar del Ys que tengo en casa, me interesa bastante poco. O, mejor dicho, me interesaba poco, teniendo en cuenta que Are We There es, con toda probabilidad, el disco del año. Van Etten dio un concierto hace un par de semanas aquí en Madrid, al que me hubiera gustado ir (y hubiera ido si hubiera escuchado el disco antes de que no quedaran apenas entradas) y que con toda seguridad fue increíble. "Your Love Is Killing Me" es una plataforma espectacular para la voz grave y llena de fuerza de la cantante de Nueva Jersey. La larga duración del tema, sumada a los tambores marciales, dan tintes épicos a esta desesperación (break my legs so I won't run to you tiene que ser uno de los versos del año). Absolutamente imprescindible.

Sin embargo, no explica en absoluto la existencia de este tumblr.


4. Ariel Pink - Lipstick


Ariel Pink se vuelve más y más (o menos y menos, depende de como lo mires) guay cada año que pasa. Es difícil explicar porque este hombre hace lo que hace, que algunos llaman "pop hipnagógico", pero que no deja de ser música ochentera de baja fidelidad. Estoy muy agradecido porque esto exista. No hay adjetivos que hagan justicia a Pink, su marca de pop retro irreverente y con un punto extremadamente ridículo es totalmente única. "Lipstick" quizá no sea el tema más destacado de pom pom, su disco de 2014, pero sí es el que más me gusta, posiblemente porque es uno de los que más me recuerda a Before Today, a "Can't Hear My Eyes" más concretamente. Es como si la banda sonora de Miami Vice tuviera un hijo con Howard Jones y Daniel Johnston. Sigue así, Ariel, porque me encanta.

Un verdadero seductor.


3. The War on Drugs - Red Eyes


A esta lista le faltaba un poco de ROCK, así, con mayúsculas. Pero claro, el rock que reivindican The War on Drugs está tan pasado de moda como todo lo del resto de la lista: ellos son más de Springsteen, Tom Petty o Don Henley, lo cual es bastante sorprendente. Los sintetizadores adquieren igual importancia que las guitarras, aunque es el sonido general, con toneladas de reverb, lo que tiene el protagonismo. En un disco lleno de canciones largas (pero nunca pesadas), resulta curioso que este tema, relativamente corto, sea el elegido, pero resume a la perfección lo que encuentras en Lost in the Dream, otro candidato a disco del año. Lo que sí contiene, seguro, es el momento del año: en el 1:45, más o menos, Adam Granduciel no aguanta más y estalla con un "WOOH" de júbilo con el que prácticamente la canción ya dice todo lo que tiene que decir. El resto es un regalo.

"OK, Whatever."


2. Lorde - Yellow Flicker Beat


Lorde fue dueña y señora del 2013, lo que le permitió tomarse este año con más calma y le aportó una fama que los productores de Sinsajo: parte 123 o como se llame aprovecharon, eligiendo a Lorde como la responsable de montar la banda sonora de la película. Con la ayuda de gente como Kanye, CHVRCHES, Charli XCX, Haim y otros artistas punteros del panorama, eso mismo hizo. Pero sin duda, la canción más genial es la suya propia. Los primeros compases nos ponen en situación: Lorde es Katniss, preparando la revolución o algo (no tengo ni idea de qué van Los juegos del hambre, así que me lo invento), pero escondiéndose de Donald Sutherland, creo: solo hay susurros durante las estrofas, no pueden descubrirles... Pero cuando llega el momento del estribillo, ya sabemos que es hora de rebelarse del todo: la batería entra como un bulldozer, los sintetizadores cubren el fondo y el distrito 12 vence al Capitolio, o algo. No sé si es así, pero esta canción me lo hace imaginar así. Con una letra bastante increíble (they used to shout my name, now they whisper it), creo que Ella hace un buen trabajo para resumir la saga, incluso aunque yo no la haya visto. 

Pero qué la pasa.


1. Weezer - Cleopatra


2014 fue el año en que entré en lo que se puede llamar la frontera de los veintitantos (hace un par de semanas, de hecho), y claro, significa que envejezco. Weezer también se dieron cuenta de que no tiene mucho sentido intentar tener siempre veinte años. Un poco tarde, pero sucedió: Everything Will Be Alright in the End cumplía su promesa, todo había vuelto a la normalidad para Cuomo y la pandilla. "Cleopatra" es casi un clásico inmediato que empieza con una declaración que resume el disco, "we grow old, our hearts are dim,but our minds are free to fly where they will". El tema abarca mucho terreno en muy poco tiempo, desde la estrofa de tintes country hasta el melancólico estribillo, pasando por los licks de guitarra orientales o el inolvidable "FIVE! TEN! FIFTEEN, TWENTY! TWENTY-FIVE, THIRTY, THIRTY-FIVE, FORTY!" que resume en ocho palabras toda la vida de Rivers Cuomo y de todo cuarentón que sigue buscándose a sí mismo. Supongo que lo de hacerse mayor es una cosa sobre todo física, pero que mentalmente nada cambia demasiado. Así que no espero un 2015 muy distinto a 2014. Gracias, Weezer, por fastidiarme el año.

"I don't care 'bout that!"
 

Related Posts

No hay comentarios:

Publicar un comentario